La PSICOLOGÍA es la ciencia que estudia la conducta y los procesos mentales, tanto básicos (atención, percepción, memoria) como complejos (aprendizaje, lenguaje, solución de problemas, etc.), incluyendo las emociones.
Cuando la psicología aplica sus técnicas para ayudar a las personas a modificar sus pensamientos, sentimientos y conductas se denomina psicoterapia.
Las psicólogas de TERAPYTEC están especializadas y ofrecen servicios profesionales en los ámbitos de la Psicología Clínica y de la Salud, la Psicología de la Educación y la Neuropsicología, para niños, adolescentes y adultos.

La Psicología Clínica y de la Salud se ocupa de las anomalías, los trastornos y cualquier otro comportamiento humano relevante para la salud y la enfermedad, con la finalidad de evaluar, diagnosticar, explicar, tratar, modificar o prevenir éstos en los distintos contextos en que puedan manifestarse. Estudia y se aplica igualmente a los procesos y estados de salud y bienestar, tratando de asegurar los mismos o de reinstaurarlos en caso de que éstos se hubieran perdido, de acuerdo con las importantes funciones complementarias de prevención y de educación para la salud.

• Trastornos generalizados del desarrollo. Autismo.
• Depresión.
• Fobia social y timidez.
• Miedos y fobias.
• Hiperactividad.
• Problemas de conducta.
• Problemas de control de esfínteres: enuresis y encopresis.
• Trastornos de la alimentación.
• Delincuencia juvenil…

• Asma bronquial.
• Trastornos cardiovasculares.
• Dolor crónico.
• Cáncer.
• Tabaquismo…

*El objeto de la PSICOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN es la reflexión e intervención sobre el comportamiento humano en situaciones educativas, en todos sus niveles y modalidades (reglada y no reglada, formal e informal) y durante todo el ciclo vital. Interviene en todos los procesos psicológicos que afectan al aprendizaje, o que de este se derivan, independientemente de su origen personal, grupal, social, de salud etc.

• Niños con factores de riesgo biológico (prematuridad y/o bajo peso, complicaciones en el período pre/peri/postnatal, enfermedad….) que puedan comprometer su desarrollo evolutivo.
• Niños con carencias en su entorno social y/o familiar.
• Alumnado con necesidades educativas especiales, permanentes o transitorias: TDA/H, sobredotación, limitaciones en capacidades intelectuales, alteraciones del lenguaje oral y/o escrito (lectoescritura), problemas perceptivos…
• Alumnado con necesidad de apoyo/refuerzo educativo.
• Familias que precisen formación/asesoramiento respecto al desarrollo, escolarización, proceso educativo, etc. de sus hijos.
• Centros educativos (servicios de orientación, formación a docentes, actividades de educación para la salud, educación sexual…).
• Servicios y organizaciones sociales (intervención socioeducativa)…

La NEUROPSICOLOGÍA es la ciencia que estudia la relación entre la conducta, los pensamientos y las emociones con las diferentes partes del cerebro. Se interesa esencialmente por la relación entre las estructuras cerebrales y las funciones cognitivas (atención, percepción, memoria, lenguaje, etc.). También estudia la relación del funcionamiento cognitivo con variables afectivas y emocionales, de independencia funcional y calidad de vida.
La Neuropsicología permite evaluar a todas aquellas personas que, por distintas patologías, padezcan cualquier tipo de daño cerebral, ya sea sobrevenido, del desarrollo o neurodegenerativo, aplicando los principios de evaluación e intervención basándose en el estudio científico de la conducta humana, en su relación con el funcionamiento normal y anormal del sistema nervioso central.

Neuropsicología Educativa

En el ámbito educativo, las aportaciones de la Neuropsicología permiten atender a todos los procesos implicados en el desarrollo y el aprendizaje: funciones sensoperceptivas y motrices, atención, memoria, lateralidad, lenguaje, procesos cognitivos… mediante la implementación de programas de estimulación que potencien todos estos aspectos desde edades tempranas o den respuesta a los posibles problemas detectados en todos estos procesos, y que pueden interferir de forma significativa en el proceso de enseñanza-aprendizaje, alterando así el desarrollo del niño y el equilibrio de la dinámica familiar.

• Daño cerebral traumático.
• Accidentes vasculares.
• Dificultades de aprendizaje.
• Trastorno por déficit de atención.
• Trastornos neuropsiquiátricos.
• Cuadros epilépticos.
• Enfermedades y tratamientos médicos.
• Efectos de sustancias toxicas y abuso de drogas.
• Demencia.